Esta segunda entrega de la trilogía basada en los libros homónimos que la estadounidense Suzanne Collins, protagonizada de nuevo por Jennifer Lawrence, Josh Hutcherson y Liam Hemsworth, llega mañana a los cines de medio mundo, precedida de una enorme expectación. «Una de las razones por las que la película ha tocado a la gente es porque los temas, e incluso algunos elementos visuales, son un espejo de cosas que están pasando, quizá no en nuestras casas, pero sí lo vemos en la tele y en internet; sabemos que hay dictadores y revueltas y vemos las consecuencias», apunta Lawrence.
Y añade: «Nos sobrecoge cuando vemos lo que pasa en Siria por ejemplo, era como un reflejo de las cosas que estábamos rodando. Cuando tienes un gobierno así y se produce una rebelión, y no estás muy seguro de quién es mejor que quién, porque hay una zona muy grande y muy gris, lo que pasa es que da miedo; eso también se ve en la película».
Lawrence, que tímidamente apunta alguna palabra en español («mi mujer es navarra», confiesa a Efe), retomó la dirección de la saga cinematográfica después de que Gary Ross abandonara tras rodar la primera parte, «Los Juegos del Hambre», que no tuvo muy buenas críticas cinematográficas, pero arrasó en taquilla. «No presté mucha atención a las críticas (...) cuando me llamaron me lo tuve que pensar, porque nunca había hecho una secuela, pero había leído los libros —«vi la película», aclara—, y pensé en qué podía crecer yo, qué podía aportar, pero también había un ‘casting’ increíble y una estética que cambiaba y aumentaba», explica.
Esta segunda parte, que se estrena hoy en cines de toda España, le ofrecía «mucho más; es cuando la historia se abre realmente y podemos empezar a explorar lo auténtico de los libros, e indagar en el aspecto sentimental de los personajes, que también era distinto», indica.
En En llamas, un truco del presidente Snow (Donald Sutherland) vuelve a llevar a Katniss (Jennifer Lawrence) y a Peeta (Josh Hutcherson) a los juegos del hambre (un maquiavélico concurso televisado donde solo sobrevive un competidor), pero los habitantes de los distritos ya han convertido a Katniss, «la chica en llamas», en su esperanza para derrocar la asfixiante dictadura en que viven.
«Katniss es muy introvertida, pero por fin se encuentra en situaciones donde tiene que mostrar sus emociones», comenta a Efe Jennifer Lawrence, satisfecha de interpretar a alguien tan fría porque «es un reto». «Me identifico con ella por ejemplo cuando vuelve a casa y la gente le trata como si fuera otra, pero ella no se siente así; a veces me ha pasado lo mismo en estos últimos meses», explica sobre la reacción a su recién ganado Óscar por El lado bueno de las cosas.
Siempre se necesita una heroína, considera la protagonista de Winter’s Bone, y más la generación actual, opina. «La gente tiene que luchar constantemente por su libertad», resume desde sus 23 años, a lo que el director añade que «sin perder de vista las consecuencias de una guerra». Los protagonistas masculinos, Josh Hutcherson y Liam Hemsworth (Gale) comparten apasionamiento, inconformismo, fidelidad y que son buenas personas, explican ambos a Efe.
«Me identifico mucho con Gale porque lucha por lo que cree y no se conforma con una situación intolerable», apunta Hemsworth, a lo que Hutcherson agrega que «los dos se mantienen fieles a lo que creen y defienden a muerte a sus familias». Respecto a la distopía que muestra la trilogía, Hutcherson opina que «es una idea muy extrema de futuro, pero no es tan lejana ni tan ajena a la raza humana».
Fuente: Diario de León (España)
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