¡¡Feliz Navidad, Tributos!!

¡Es impresionante que ya estemos en estas hermosas fechas! Y terminando este genial año 2013. No tenemos palabras para agradecerles por estar ahí siempre junto a nosotras y por elegirnos cada día. 

Les deseamos una Feliz Navidad, Tributos. Queremos de todo corazón que puedan compartir estas fiestas con su familia, amigos y cumplan todos sus deseos!!!



Este es nuestro regalo para ustedes, les dejamos este hermoso fanfic llamado "Un día de Invierno". Está ambientado en Post-Sinsajo, pero antes del epílogo. ¡Disfrútenlo!

Un día de invierno

Por: Reni Readiris

Es tiempo de Navidad y Katniss esta aburrida. Ella va a revisar el correo en un día de nieve pero termina en una pelea de bolas de nieve. Y Peeta hace una pregunta que tiene una respuesta afirmativa o negativa. ¿Podrá decir que sí? 

(Katniss POV)

Esta es la primera vez que Peeta y yo podemos disfrutar juntos la nieve. Después de que los juegos terminaron, estaba la rebelión. Cuando la rebelión terminó, estaba el hecho de que Peeta quería a veces arrancarme la cabeza. No me importa. Ya está bajo control ahora. Pero el primer año, no fue así. Pasábamos tiempos juntos, tiempos separados, tiempos enojados y tiempos tristes uno junto al otro. Eventualmente, decidimos comenzar otra vez.
Ahora es navidad, mi estación favorita. La estación favorita de Peeta es el verano. La mía no. Siempre he estado fascinada por la nieve, los copos pequeños que caen desde el cielo hasta el suelo, copos tan pequeños, pero logran verse realmente grandes.
Estoy sentada en el sofá, viendo la nieve caer. Caen en el suelo de nuestra casa blanca, decorando los árboles y el pasto. Peeta está horneando algún tipo de pan. No sé cuál, pero huele como el cielo y así es como imagino que debe ser la navidad. Sin embargo, sentada en el sofá con una taza de chocolate caliente no es mi idea de un día perfecto de invierno.
¡Qué puedo hacer?, ¿qué puedo hacer? Decido ir a recoger el correo. Esperando que ya este allí, pero no puedo estar segura.
Cuando llego al buzón, estoy cubierta de nieve. Me volteo y veo a Peeta parado a pocos metros de mí, luciendo inocente, actuando como si no me hubiera arrojado una bola de nieve hace unos segundos. Lo miro y apunto a un lado de la casa, fingiendo que hay algo allí. Se da la vuelta y le arrojo nieve tan rápido como puedo. Estoy agradecida por mi puntería. La bola de nieve golpea un lado de su cabeza y Peeta se voltea. Soy más rápida que él así que corro rápido antes de que pueda formar un pensamiento coherente.
Me escondo en el sótano. Escucho pasos, el crujido de sus botas sobre la nieve, acercándose a donde estoy escondida. Cuando Peeta se acerca lo suficiente para verme, le arrojo a su cara dos bolas de nieve. Algo de nieve cae a su abrigo. Está en shock, su cara de "enojado" me hace reír. Lo veo venir tan rápido como puede hacia mí, pero no con mi corazón puesto en esto. Quiero que me atrape, pero al mismo tiempo, quiero que me persiga hasta que nos cansemos. Tristemente, me atrapa, me levanta y arroja encima de su hombro. No es lo que esperaba. Emito un chillido, tratando de ahogar la risa en mi garganta.
"Peeta! Bájame" Le digo, esperando que se escuche serio, pero la verdad, me estoy riendo.
Me carga por un largo rato, el tiempo suficiente para preguntarme como no se ha congelado hasta la muerte. Sigo chillando, rogándole que me baje. Finalmente, después de una eternidad, lo hace. La sangre baja a mi cara.
"Te amo" dice Peeta, atrapándome fuera de guardia. Me mira diferente, como si yo hubiera cambiado. Y tal vez lo he hecho, pero él no me ha mirado así de esa manera, al menos no, desde que los primeros  juegos del hambre terminaran.
Me levanto de puntillas y lo beso con alegría. "Yo también te amo"
Nos miramos por unos momentos antes de aclararme la garganta. El mira hacia otro lado, pero no por vergüenza. Mira por delante de mí y trato de adivinar su expresión.
"Katniss" dice despacio. "Si te digo que tengo está loca idea - una posible idea suicida  - la escucharías?"
"No veo porque no" digo, pero me pongo rígida. Espero que no esté bajo la influencia del capitolio o lo que le hayan hecho.
"El Lago" apunta hacia él. "Podemos patinar en el?"
Lo analizo por largo tiempo. Es diciembre. He visto antes a niños patinando en el lago. Sé que cosas malas pueden pasar. Pero, al mismo tiempo, sé que él lo necesita. Así como yo. Necesitamos sentirnos libres, como si pudiéramos controlar algo más que nuestro amor.
Tomo su mano.
"Sí"
Sonríe y me lleva al interior de la casa. Subo a nuestro cuarto y voy por nuestras botas de patinar. Las tomamos y vamos corriendo al lago, totalmente conscientes que la cuchilla del fondo puede matarnos, pero no nos importa. Nunca me lastimara. Yo casi creo que nunca me hará daño.
El lago esta blanco, congelado y hermoso. Me deslizo en mis botas. Las compramos hace 2 semanas y es la primera vez que la usamos. Espero que no sea la última.
"Vamos" dice Peeta, ofreciéndome su mano. Le doy la mía y la aprieta. Estoy entumecida debajo de mis guantes pero su toque me calienta instantáneamente. Me guía hacia un lado del lago. Al principio, me siento como si fuera a caer. Siento este horrible sentimiento en mi estómago, diciéndome que voy a morir en el lago.
Pero Peeta está a mi lado y me doy cuenta de que todo estará bien.
Al principio, solo probamos, tratando de buscar los lugares débiles del lago. No están donde estamos nosotros, significando que podemos patinar con libertad. Hago un giro, tratando de no caerme y romperme un tobillo - o peor, romper el hielo.
Decido patinar cerca de él. Está parado allí, mirando el atardecer. Dice que es su color favorito, el color del atardecer, ese naranja, derramándose sobre el cielo como tinta sobre páginas. Tomo su mano y me detengo, mirándolo con él. Me da un apretón. Nos miramos el uno al otro y lo beso otra vez.
Cuando estoy por preguntarle para patinar otra vez, me regresa a sus brazos. Me sostiene con el brazo extendido. Tambaleante, se empieza a arrodillar.
"Peeta", jadeo. "Que estás haciendo?"
Esta sobre una rodilla. Siento que estoy por desmayarme.
"Katniss Everdeen", Peeta dice, el amor en su voz hace que mis ojos empiecen a llorar. Sabía que esto estaba por venir. No debería estar sorprendida. "Te amo con mi corazón y alma. Sin tí, no soy nadie. Me mantienes sano. Tú me dices que es real."
Una lágrima baja por mi mejilla.
"¿Quieres casarte conmigo?"
Él sostiene un costoso y brillante anillo, no que me importe lo brillante que luce. Lo que me importa es el chico que lo sostiene, el chico del pan.
Dejo que coloque el anillo en mi dedo.
Él se levanta.
"Por supuesto que me casare contigo, Peeta Mellark" Lo beso, mis brazos alrededor de su cuello, deseando levantarme en puntillas.
"Yo" dice besándome una y otra vez entre palabras "Te amo."
Dejo salir una encantadora risa. Tal vez, solo tal vez, todo estará bien.



Sil, Ara, B, Gaby, Zai, Gi y Sammy
...Real or not real News...

3 comentarios:

Mar dijo...

¡Feliz Navidad!!!!!! Muchas gracias por otro maravilloso año en el que habéis sido, sin duda, la mejor fuente de información sobre Los Juegos del Hambre. :D

Anónimo dijo...

Feliz Navidad! Gracias por todo este año maravilloso que nos dieron :3 Ojalá pasen unas felices fiestas llenas de amor. Gracias por el fanfic, esta muy hermoso :3
Feliz Navidad a ustedes y a los hermanos tributos!

Alejandro Lc dijo...

No pude con la emoción y ternura que emite. Gracias por los deseos y por el fic. Igualmente Feliz Navidad!!!

Publicar un comentario