Capitol Couture: Poder felino

El Capitol Couture nos conseja esta vez como podemos usar el Animal Print

La moda es una pasión depredadora. La cazas, te abalanzas, la consumes. Liderarla es fácil cuando canalizas en un gato grande en toda su gloria manchado, rayado y tendinoso. El leopard print está alto en el ranking de los más elegantes por razones obvias: Los magros felinos pueden correr a 35 millas por hora y comer animales dos veces su tamaño, una habilidad obligatoria cuando compras en una venta de muestra en el Capitolio. Pero no descartes el jaguar, pantera, tigre o lince como inspiración cuando te vistas. 



  • HAZLO: Interpreta al barman, como el rebelde diseñador Jeremy Scott lo hace, emparejando las rayas del tigre de Bengala con manchas de ocelote o leopardo. El contraste es la clave. Para empujar los patrones y estampados de interespecies, todo lo que necesitas es sentido del humor y la participación de la autoestima de un cachorro de león. Por un guiño astuto en la cadena alimentaria, me gusta usar jeans ajustados con impresión de cebra con una blusa de seda con leopardo print. El diseñador Christopher Kane favorece un look de leopardo de las nieves en gris helado, lo que choca a la perfección con los tonos del desierto de las impresiones tradicionales de gato.
  • NO LO HAGAS: Hacer a los gatos mansos llegar últimos, o tendrás una estampida! así que no te limites a un accesorio de animal print como una chalina o un pañuelo. Tal sutileza nunca conseguirá notarse o un acceso VIP tampoco. En su lugar, elige al menos tres acentos animales afines como los stilettos de Charlotte Olympia, puños de gran tamaño y un par de gafas de sol.
  • ATRÉVETE: Toma el look de las alturas vertiginosas por festoneando tu cofia con motivos del rosetón de un leopardo. En la reciente feria de alta costura de Jean Paul Gaultier en París, el diseñador travieso hizo que sus modelos fueran carnívoros de la cabeza a los pies. El estilista de cabello Odile Gilbert pintó manchas en los peinadoas altos y jopos yuxtaponiendo lo banal con el refinamiento.

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